Volver atrásEl Turrero Post

Análisis de la convergencia entre CPS e IA en las firmas de servicios profesionales

Publicado el 11/11/2023 / 7:09:11. Tiempo de lectura: 6min.Leer en Twitter

En el hilo turras de hoy, vamos con la segunda parte de la trilogía sobre la convergencia entre CPS e IA, y en particular con el foco en la futura reconversión de las firmas de Servicios Profesionales.

A pesar de que me he convertido en una especie de poster boy a la hora de mofarnos de la consultoría, en realidad me pasa lo mismo que con el Design Thinking, Lean o Agile, o tantas otras cosas. Me gustan como actores, pero solemos tener un problema de casting.

Gigantesco actor, y sumamente versátil, lo mismo te borda Goodfellas que Solo en Casa.

Entonces, en resumen, mi problema con un montón de disciplinas es que sus egos expiden una serie de cheques que su talento no pueden pagar.

Sin embargo, si quiero plantear mi tesis de como la IA va a alterar un sector por completo, tenemos que tener clara la diferencia entre el mapa y el territorio.

Vamos a establecer una taxonomía somera de las diferentes variaciones de prestación de servicios que caen todas bajo el epígrafe común de "consultoría", porque creo que sin ese mapa básico, nos vamos a perder en el bosque de la semántica.

Por ejemplo, vamos a intentar diferenciar entre servicios profesionales y consultoría, y dentro de ella entre consultoría estratégica.

La diferencia entre una empresa de servicios profesionales y una firma consultora es que los servicios profesionales se enfocan en la implementación, mantenimiento y soporte de productos, mientras que la consultoría se enfoca en asesorar, ayudar y definir soluciones.

En otras palabras, los servicios profesionales se enfocan en la implementación de soluciones, mientras que la consultoría se enfoca en la definición de soluciones.

Cuando esas soluciones son de naturaleza estratégica, estaríamos hablando de consultoría estratégica.

Por ejemplo, una empresa de servicios profesionales podría ayudar a una empresa a implementar un nuevo sistema de software, mientras que una firma consultora podría ayudar a una empresa a definir una estrategia de marketing para un nuevo producto.

En resumen, aunque ambas empresas pueden ofrecer servicios similares, la diferencia radica en el enfoque y la especialización de cada una.

Esa es la teoría. Y ese es mi problema. Quiero decir, no tengo ningún problema con la teoría. Salvo que la práctica caiga en abierta contradicción.

Si no habéis leído este libro, os recomiendo que le echéis un vistazo.

La realidad habla de como varias personas de US Steel o visitantes de parques Disney morían por falta de mantenimiento y reparación básica para ahorrar costes.

Naturalmente, mientras tanto, y con el objetivo de proyectar una realidad inexistente, mostraban una asertividad y una seguridad impostada para dejar claro que "sabemos de lo que hablamos"

Javier G. Recuenco @Recuenco · Oct 8, 2022

Donde os conté la legendaria anécdota de Matthew Stewart cuando le rechazaron en Mckinsey:

Por contraste, mi primera frase en un cliente suele ser "No tenemos ni puta idea de tu sector, esa es tu labor" Maravilloso semáforo para irnos cada uno a nuestra casa si esta frase resulta problemática.

Las últimas décadas, la consultoría y los servicios profesionales han sido históricamente una especie de suministradores de mano de obra cualificada instantánea.

Es gente capacitada, en muchas ocasiones muy capacitada, no es un gasto consolidado (Como lo sería contratar a una persona) y es una póliza de seguros para el directivo contratante con según que nombres.

Sin embargo, la mayor parte de la problemática asociada al sector, que es tremendamente popular a pesar de no gozar de buena prensa, son problemas de casting.

Esto fue siempre así? Paradójicamente, el comienzo de la consultoría fue completamente diferente al paisaje actual.

Arthur D. Little fue un ingeniero químico estadounidense que fundó la primera empresa de consultoría de gestión en 1886.

Fue el creador del concepto de operaciones unitarias, que le permitió definir el papel de la ingeniería química y explicar los diferentes procesos químicos industriales.

Además, fue uno de los primeros ingenieros que creó el concepto de servicios profesionales destacados.

La empresa de consultoría creada por Arthur D. Little sigue funcionando en la actualidad y es una firma internacional de consultoría de gestión que tiene su sede principal en Boston. En su momento fue adquirida por los propios empleados. https://cincodias.elpais.com/cincodias/2012/01/02/empresas/1325674737_850215.html….

La empresa ha llevado a cabo importantes investigaciones, como la primera penicilina sintética.

En el año 1968 desarrollaron el primer libro blanco de la Comisión Europea sobre la desregularización de las telecomunicaciones, así como contribuyó a la privatización de British Rail, que fue considerada una de las operaciones de privatización más complejas hasta el momento.

Arthur D. Little se preciaba de tener a gente con décadas en la industria como prerrequisito antes de trabajar. Lo que tiene mucho más sentido que tener trabajando en consultoría a gente a la que aún no se le ha secado la tinta del título.

La madre que me matriculó en Macroeconomía: Turra Limit hits. Un resumen rápido de la tesis y a seguir circulando.

El sector de la consultoría y el de los servicios profesionales tiene y ha tenido históricamente todo el sentido del mundo mientras ha entendido cual es su papel y lo ha ejecutado de manera profesional.

Durante un tiempo que empezó en los '80, el sector tuvo un deal muy particular que funcionaba: La consultoría servía como un acelerador de la transformación en compañías normalmente con problemas de aggiornamiento competitivo. Tecnología. ERPs. BPM. Yo name it.

El problema es que a partir de ahí, con la demanda superando por mucho la oferta, comenzaron a hacerse comunes una serie de atajos que comenzaron a diluir la propuesta inicial.

Gente joven sin experiencia donde debería haber gente con muchísima, gente con skills técnicos donde debería haber gente con skills de negocio, bean counters y lijacostes donde debería haber estrategas.

Ahora llega un exoesqueleto multiplicador 50 X. Recordad que la X es la clave, no el 50.

Toda una serie de tareas pesadas relativas a la captura de información, proceso, presentación... que eran muy intensivas en demanda de brains for hire, van a ser dramáticamente alteradas por la nueva ecuación.

Necesitas a gente mucho más senior en skills antitéticas con respecto a las históricas (ergo, en CPS) para multiplicarla por 50 en lugar de un autobús de brazos disponibles.

Esto además, va a reventar por completo el mercado comercial de los servicios profesionales, que básicamente depende de la disponibilidad de capable bodies con skills perfectamente gestionables y boosterizables por la IA.

Un mercado, que además ya tiene sus propios problemas como los ciclos comerciales cortos y constantes, y el constante feast or famine.

Os recuerdo que es lo que pasó en Microsoft: Pasó de vender licencias SW y acuerdos multiaño a tener que vender soluciones de negocio basadas en tecnología -> La mitad de su equipo comercial saltó por los aires.

La presentación del miércoles de Pallete hubiera logrado que lo levantaran a hombros hace dos décadas. Lo que ha recogido está entre la fría indiferencia y el, digámoslo claro, el cachondeo manifiesto.

Martinez @MrtnzAlvrz

Let f****ing go! Apartate, estamos reimaginando la industria aqui hoy neno

El listón ha subido, las exigencias son mayores, las marcas para las Olimpiadas son más exigentes que nunca. The jig is up. #Finhilo

P.D: Naturalmente, puedo estar completamente equivocado, y OpenAI tener sesgo de confirmación. Por ejemplo, podéis confiar en estudios altrenativos sobre la evolución del mercado del trabajo, como éste de... Mckinsey.

P.D. II: Huelga decir que los servicios profesionales, que no tienen un pelo de tontos, harán su movimiento antes o después con respecto al CPS. El problema es que su patrón hasta ahora ha sido adquirir talento no residente para extendr la mancha de billable hours. Veurem.

P.D. IV: "We had to invent our own way of doing things that wasn´t necessarily conventional. In hindsight, that is what led to people having to invent a way of songwriting that ended up being much more creative than just sitting at a computer trying to copy someone else"

- Andy McCloskey, OMD, as mentioned in "Mad World: An Oral History of New Wave Artists and Songs That Defined the 1980s"