En el hilo turras de hoy, vamos a hablar de cosas delicadas alrededor del Factor X. Mujeres, primates y científicos. Ningun colectivo sin ofensa. A la liana, chavales.
En el hilo turras de mañana, y en sincronía cósmica con la gran @Rebevolutions voy a hablar de Factor X, mujeres y macacos. A ver si con el tema de Lilibeth pasa desapercibido y no me crujen.
No tengo ni idea de si le voy a hacer justicia a la historia, porque es un historión, pero fundamentalmente la traigo encima de la mesa por varias razones. Entre otros, dejar claro que la ciencia no es ajena al factor X.
Obviamente, esto ya ha sido desarrollado parcialmente por mi en el pasado, fundamentalmente alrededor del trabajo de uno de mis autores favoritos, Sesardić:
Son una minoría? En absoluto. Os acordáis de uno de mis autores imprescindibles, Sesardić? https://twitter.com/Recuenco/status/1347809335343247360?s=20…
Los Ángeles de Charlie, Las Powerpuff Girls, y las tres Heathers: tres grupos de tres mujeres increíbles. Esta semana, hablamos de un trío que las supera a todas (al menos en primatología).
En este tríptico, contamos las historias de tres mujeres que llevaron su campo más lejos que nadie en la historia. Esta es la historia de las Trimates: Jane Goodall, Dian Fossey y Birutė Galdikas.
Mi primer contacto con las Trimates fue a través de Gary Larson, y la historia de este comic es absolutamente deliciosa. La leí por primera vez en una antología de The Far Side.
Otro día le dedicaré un hilo entero al trabajo de Gary Larson, que aparte de tener un sentido del humor excepcional, fue el primero que abrochó liminalmente dos campos que eran agua y aceite en aquel momento: La ciencia y las tiras cómicas.
XKCD, Abstruse Goose, The Oatmeal o aquí Sinergia sin control son ejemplos de excelente material que le deben algo al viejo Gary.
Mi siguiente contacto, fue obviamente, con este representación de Dian Fossey:
De manera independiente era consciente de la historia del matrimonio Leakey y sus andanzas en el valle de Olduvai. Un resumen de este libro apareció en uno de mis libros del Reader's Digest. https://goodreads.com/book/show/1320753.Olduvai_Gorge…
Y finalmente, no fue hasta mucho después que conocí la historia de Birutė Galdikas y el hilo invisible que los unía a todos.
Louis Leakey merecería un hilo por si solo, pero lo vamos a dejar en que es una de las vidas más fascinantes del siglo XX. No es casualidad que su trabajo verse sobre disciplinas core del Factor X.
El interés de Louis Leakey por la etología de los primates surgió de sus intentos de recrear el entorno en el que vivía el primate Proconsul en la región de la isla de Rusinga. Vio similitudes entre este entorno y el hábitat de los chimpancés y los gorilas.
Llevaba intentando encontrar observadores desde 1946. En 1956, envió a su secretaria, Rosalie Osborn, al monte Muhabura, en Uganda, para "ayudar a habituar" a los gorilas, pero ella regresó a Inglaterra después de cuatro meses.
Leakey estaba pensando en aceptar el trabajo él mismo cuando Jane Goodall llamó providencialmente su atención.
Para financiar la investigación de Goodall en la Reserva del Arroyo Gombe, Leakey creó el Centro de Investigación de Primates Tigoni en 1958. Con donaciones de fuentes como la National Geographic Society y la Fundación Wilkie.
A la hora de elegir a tres personas a las que enviaría a vivir con los grandes simios, el legendario paleoantropólogo Louis Leakey eligió a tres mujeres -muy conscientemente, según Jane Goodall- para enriquecer el campo de la primatología.
"Tuve mucha suerte", dice, "porque Louis Leakey creía que las mujeres serían mejores observadoras en el campo que los hombres. Pensó que serían más pacientes".
Goodall afirma que las mujeres pueden haber evolucionado para ser observadoras agudas porque suelen desempeñar un papel más importante en la crianza de los niños:
"Para hacerlo bien, hay que ser paciente, hay que ser capaz de entender los deseos y las necesidades de una pequeña criatura antes de que pueda hablar y, además, hay que ser muy observadora de las relaciones en el...
...grupo familiar o la tribu, porque quieres mantener a tu hijo alejado de un miembro de la familia que esté de mal humor o algo así. Así que todos esos atributos, si [esta teoría es] cierta, tenderían a hacer mejores a las mujeres".
La primatología es ahora un área de la ciencia con una de las proporciones más altas de mujeres vs hombres científicos. Pero también es un área cargada de dificultades.
Los científicos tienen que pasar meses con los animales antes de que se acostumbren a la presencia humana, y el trabajo de campo se realiza a menudo en países en guerra o políticamente inestables. En este último caso, sin embargo, ser una investigadora puede tener sus ventajas.
"Ser mujer me ayudó de forma práctica", escribió Goodall en un ensayo de 2018 para Time. "Los hombres blancos seguían siendo percibidos como una especie de amenaza, mientras que yo, como simple mujer, no lo era".
Julia Badescu es una científica que siguió los pasos de Goodall. Hoy estudia los chimpancés en Uganda. "La primatología se ha beneficiado en muchos sentidos de la entrada de muchas mujeres en este campo.
Gracias a Jane Goodall, Dian Fossey y Biruté Galdikas... sentaron las bases para que las mujeres se dedicaran más a estos estudios", afirma.
Durante mucho tiempo, los hombres dominaban el campo, y las mujeres que trabajaban bajo la supervisión de los hombres solían estudiar comportamientos como la matanza, la caza y la dominación masculina.
Badescu afirma que las mujeres aportaron perspectivas diferentes a su estudio.
"Las cuestiones femeninas podrían tender más a los rangos de dominación de las hembras, a entender cómo se relacionan entre ellas, las diferentes estrategias de las hembras a la hora de copular y tratar de quedarse embarazadas... ¿prefieren copular con individuos concretos o…
…copulan con todos para confundir la paternidad?". Considera que para obtener la mayor perspectiva científica posible, otros grupos poco representados en este campo deberían convertirse también en observadores de primates.
"¿Cuáles son las preguntas que podría hacer una persona discapacitada? ¿Cuáles son las preguntas que podría hacer una persona de color? ¿O una mujer o un hombre gay? Creo que se están ignorando muchas de ellas".
Por supuesto, Badescu no es la única que sigue el camino de una de las tres investigadores de renombre de Leakey. Al transformar la primatología, las Trimates se convirtieron en modelos para innumerables mujeres jóvenes que de otro modo no se habrían dedicado a la ciencia.
Galdikas, que lleva casi 50 años estudiando a los orangutanes de Borneo, atribuye el éxito de las tres mujeres a su determinación.
"Gracias a que nos quedamos, descubrimos cosas sobre los grandes simios que habrían sido imposibles de averiguar de otra manera. Así que creo que es esa acumulación de datos, de quedarse, lo que ayuda a servir de modelo a la gente"
"Los jóvenes tienen muchos más modelos de conducta", continúa Galdikas, "[y] sus modelos de conducta son mucho más diversos. Puedes pensar en los primeros astronautas, exploradores, músicos, investigadores, directores de cine... todos son hombres, al menos inicialmente, ¿no?
Así que creo que los hombres tienen un universo mucho más amplio para elegir, mientras que las mujeres tienen un universo mucho más pequeño, y eso puede explicar por qué la gente nos mira, las chicas nos miran, como modelos a seguir."
El Centro de Investigación Tigoni ayudó a garantizar la financiación de las tres mujeres. Tras la independencia de Kenia, el centro se convirtió en el Centro Nacional de Investigación de Primates.
Posteriormente se convirtió en el Instituto de Investigación de Primates de los Museos Nacionales de Kenia, situado en Nairobi.
En el momento de la muerte de Leakey, en 1972, Goodall y Dian Fossey habían avanzado mucho en sus investigaciones de campo a largo plazo en África, mientras que Birutė Galdikas acababa de iniciar sus estudios de campo en Indonesia.
Una cuarta investigadora, Toni Jackman, había sido seleccionada para estudiar a los bonobos en África, pero la financiación y los permisos necesarios aún no se habían conseguido antes de la muerte de Leakey.
La madre que me matriculo en Estructura de Datos y de la Información. Turra limit buzzer. A recoger y resumir.
Hay muy pocas escenarios donde podamos separar del problema a resolver las personalidades de quienes tienen que resolverlo. Especialmente en problemas complejos, donde la construcción de hipótesis es clave.
La tesis de Leakey, que no estoy capacitado para validar, parte de un error de base personotécnico: Creer que las mujeres son un macrosegmento. Las personalidades de Goodall, Fossey y Galdikas no podían ser más diferentes.
Leakey hizo de Charlie en los Angeles de Charlie y envió a tres personalidades diferentes a tres misiones similares con declinaciones diferentes, lo que nos permite una mirada única al fenómeno.
Por ejemplo, mandar una persona como Fossey, con una alta capacidad de pelea, que juraba como un camionero y fumaba/bebía de manera acorde, a un entorno tan agresivo como los furtivos en Ruanda, igual no fue una buena idea.
Mi punto es que una persona como Goodall tenía una serie de ventajas competitivas en su perfil psicológico para la tarea. El resultado final es que ha sido la más exitosa de todas y la que ha logrado un legado mayor y más profundo.
A pesar de ser la única sin título universitario. Se le permitio estudiar un doctorado en Cambridge de manera extraordinaria. Menos de una decena de personas en la historia han podido hacerlo. En España tenemos el ejemplo del doctor Valverde, uno de los fundadores de Doñana.
Galdikas no ha logrado penetrar la historia tanto porque ella decidió convrtirse en semireclusa y proyectarse menos hacia el exterior. Otro trait de personalidad claro.
No hay duda alguna de que las mujeres, como los hombres, necesitan modelos, y que éstos muchas veces desafían convenciones sociales. @ddamasd menciona mucho el ejemplo de Whoopi Goldberg y Star Trek.
Las mujeres pueden hacer perfectamente muchas cosas de las que históricamente se les ha privado, y al mismo tiempo pueden ser competentes e inútiles, agradables e hijas de puta. Ni son lo peor ni son seres de luz. Son humanas. Gauss rulez.
Es absolutamente imposible separar a la gente de su naturaleza. Hay presidentes de guerra y presidentes de Paz, como Churchill verificó por las malas.
El factor X, cuando se le considera, es muchas veces como un factor menor o un modificador de contexto. Yo estoy convencido que es parte fundamental del enunciado del problema. #finhilo.
P.D.I: Este libro fue el primero que me permitió trazar una línea recta entre ellas y Leakey. Es un comic maravilloso y una perfecta puerta de acceso al agujero de gusano que es la vida de estas chicas.
P.D II: Frans de Waal (Primatólogo) la está montando ahora mismo con su libro sobre género y primates (Otro día hablaremos de ciencia y mal timing con el zeitgeist), pero lleva trabajando en libros fascinantes desde forever:
P.D III: Y si ya quereís porno duro y buscaís que os azoten mientras decís "Oh si, cancélame, nena", este es vuestro libro:
P.D IV: Muchos documentales sobre el tema, éste es excepcional: